Trabajar sin dejar de vivir: mejores prácticas de integración vida-trabajo en México

México es el tercer país de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) con las jornadas laborales más largas. Los países más productivos del mundo se distinguen por tener un menor número de horas trabajadas a la semana, dado que los periodos laborales excesivos contribuyen al agotamiento de los empleados y a una reducción de productividad.  

Los trabajadores de plantas productivas y maquiladoras enfrentan condiciones aún más complicadas. Hasta hoy, las políticas públicas no han incentivado condiciones laborales incluyentes y en favor del bienestar de los empleados.

  • El 73% de los trabajadores de maquila laboran al menos media jornada más a la semana para complementar su ingreso por horas extras.
  • El 20% de las madres hacen trabajos extras o tienen otro empleo de fin de semana para compensar su ingreso.
  • El 69% de los trabajadores de maquila no tiene permiso para  llevar a sus hijos al doctor sin que les apliquen descuentos en su salario.

Estas condiciones no solo amenazan la calidad de vida de los trabajadores, también la rentabilidad de las empresas.

Mañana, 23 de octubre, entra en vigor la NOM-035-STPS-2018, que busca mejorar las condiciones psicosociales en las que se desempeñan los trabajadores en México. Las organizaciones tendrán que demostrar que tienen una política de prevención de riesgos psicosociales y evaluaciones de entorno, así como acciones documentadas para prevenir y solucionar riesgos.

La implementación de la NOM es una responsabilidad compartida entre empleados y empleadores que representa una gran oportunidad para institucionalizar prácticas balance vida-trabajo a nivel nacional. 

¿Qué hacen en México los empleadores más innovadores en prácticas de integración vida-trabajo? 

El IMCO realizó 50 entrevistas a diversos empleadores para identificar políticas de integración vida-trabajo. Además, se realizó un modelo con información anonimizada de Great Place to Work para conocer los beneficios que se generan al incorporar prácticas de integración vida-trabajo a los empleos.

¿Qué aprendimos?

  • México tiene organizaciones pioneras que han implementado prácticas exitosas. 
    • Es fundamental que este tipo de prácticas lleguen a todos los niveles de la organización, no solo a los puestos administrativos y corporativos.
  • Existe una gran diversidad de prácticas que inciden en diferentes dimensiones de la calidad de vida de los trabajadores. El IMCO las agrupó en cinco: 1) flexibilidad de tiempo y/o espacio, 2) balance familia y trabajo, 3) salud y bienestar, 4) movilidad, e 5) inclusión de género. 
  • El modelo confirmó las lecciones aprendidas: las empresas con más opciones de balance vida-trabajo son mejor evaluadas por sus trabajadores. Esto se puede traducir en menor rotación, mayor compromiso y productividad.
  • Las políticas de integración vida-trabajo son trajes a la medida. En gran parte, su éxito depende de que respondan a las necesidades del personal. A continuación se enlistan las ocho lecciones que debe tomar en cuenta toda organización que quiera comenzar a implementar tales políticas:

Si los grandes empleadores incorporan políticas de integración vida-trabajo en sus oficinas y plantas de producción, podrían transformar la vida del 26% de los empleados formales ocupados a nivel nacional. Estos son algunos de los beneficios:

  • Mejoran la calidad de vida de los empleados.
  • Bien diseñadas, son acciones costo-efectivas para las organizaciones.
  • Contribuyen al cumplimiento de la NOM-035.
  • Contribuyen al avance de siete de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.

IMCO propone

Para las organizaciones:

  • Realizar autodiagnósticos para conocer las necesidades del personal.
  • Explorar diversas opciones de flexibilidad que puedan transformar la vida de los trabajadores, incluidos los operativos.
  • Invertir en políticas de integración vida-trabajo en toda la estructura de las organizaciones.
  • Evaluar y comunicar el impacto de las políticas. Los colectivos empresariales podrían sugerir mediciones estandarizadas.
  • Evaluar las alternativas que tiene una organización para favorecer el cuidado de los hijos, particularmente en la primera infancia.

Para las autoridades:

  • Incentivar que más trabajadores se sumen a la formalidad laboral (ej, con la eliminación del ISR para empleados que ganan menos de 10,298 pesos al mes).
  • Crear un área dentro de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social que dé asesorías a empleados y empleadores con respecto a la aplicación de la NOM-035, que genere contenidos sobre el cumplimiento de la norma, ofrezca capacitaciones y resuelva dudas.
  • Incluir reglas claras para evaluar la implementación de la NOM-035.
  • Establecer una política nacional de datos que incluya los reportes generados por las empresas a partir de los cuestionarios realizados a los trabajadores.

Infografía