¿De qué mueren los mexicanos?

Una invitación a reflexionar sobre las tendencias de mortalidad en nuestro país.

La calculadora del IMCO sobre causas de muerte para los mexicanos, muestra las principales tendencias por edad, sexo, ocupación, estado civil, escolaridad y lugar de residencia en el país con información del Sistema Nacional de Información en Salud (SINAIS) de las actas de defunciones ocurridas en México entre 2004 y 2011. Además de saber de qué han muerto los mexicanos con características poblacionales similares a las nuestras, es una herramienta que los tomadores de decisiones en materia de salud pueden utilizar para el diseño de programas de prevención y atención de enfermedades más comunes en los próximos cinco años.

Las políticas públicas en México no suelen estar orientadas a la previsión de las necesidades de la población. Como hemos visto en los casos de los desastres naturales, la prevención de delitos, la educación, o el desempeño económico, las respuestas institucionales obedecen más a una lógica reactiva—que resulta más costosa en el largo plazo—que a un esquema de protección y previsión.

En materia de salud pública, las políticas reactivas no son la excepción: las campañas a favor de la actividad física y la alimentación equilibrada tuvieron que esperar a que México ocupara el segundo lugar en obesidad en adultos y el primero en obesidad infantil para tomar relevancia. Desafortunadamente, dichas campañas comenzaron tarde: actualmente la epidemia de obesidad es el principal problema de salud en México, las enfermedades asociadas a ella—como la diabetes, hipertensión y enfermedades cardiovasculares—ocupan los primeros lugares de causas de muerte entre los mexicanos y representan altos costos para el Estado. Por ejemplo, el 80% de los adultos mexicanos que padecen diabetes, están diagnosticados y reciben tratamiento, lo que implica un gasto de 3,430 millones de dólares al año.  Un amplio porcentaje de los niños y niñas que actualmente padecen obesidad o sobrepeso, serán pacientes diabéticos que se sumarán a dichos costos en los próximos años.

En nuestro país son cada vez más comunes las muertes por enfermedades que pueden prevenirse desde los primeros años de vida. Entre éstas se encuentran las lesiones por virus de papiloma humano (VPH), que no sólo es responsable del cáncer cervicouterino—que mata a más de 4,000 mujeres mexicanas cada año, sólo por debajo del cáncer de mama—, sino también de tumores malignos en genitales en hombres y mujeres. Las infecciones por VPH han demostrado reducirse significativamente con vacunas aplicadas durante los primeros cinco años de vida  en niños y niñas. Por otro lado, atender dichas complicaciones entre mujeres y hombres adultos en la segunda etapa de la enfermedad, superó los $90,000 anuales por año por paciente.

Otro ejemplo es el cáncer de mama, la primera cause muerte entre las mujeres mexicanas, que es curable en las primeras etapas de la enfermedad. El tratamiento va desde los $74,522 en la etapa menos avanzada de la enfermedad, hasta los $199,274 por año por paciente[1] durante la última etapa. En este caso, las campañas de concientización y exploración periódica han reducido la incidencia de casos terminales, pero aún muere una mujer cada 90 minutos por esta causa. Otras muertes están relacionadas con el aumento de la población urbana de adultos jóvenes, como los accidentes automovilísticos, que durante el 2007, costaron al Estado 1% del PIB.[2]

Si consideramos que uno de los principales objetivos del gobierno mexicano es garantizar la universalidad de los servicios de salud para su población—el número de mexicanos beneficiarios del Seguro Popular creció 300% entre 2006 y 2012—y el gasto público en servicios de salud, investigación e infraestructura relacionada es uno de los más importantes del país, es fundamental conocer las tendencias de mortalidad entre los mexicanos.

Utilizar una parte de los recursos en políticas preventivas y tratar las enfermedades que se presenten en las etapas más tempranas es la única vía para lograr atender a toda la población en el país líder en obesidad a nivel mundial y donde el porcentaje de mujeres en edad reproductiva y personas en edad avanzada crece cada año. A nosotros nos toca consultar la calculadora y saber cuáles son las áreas de nuestra salud a las que tenemos que prestar mayor atención.