Estamos a unos días de acabar el 2021 y comenzar el tercer año en medio de una pandemia que ha alterado y transformado al mundo. Quedó claro que no se puede predecir el futuro en bola de cristal, pero sí de prevenir, alertar y prepararnos sobre aquellos sucesos que conocemos y que tienen una alta probabilidad de ocurrir ¿Cuáles son los cinco eventos que nos ocuparán en el 2022?
1. Pandemia y atención en salud: La pandemia se apropió de todas las agendas, sobre todo la de salud. En el siguiente año tendremos que afrontar problemas que se arrastran como el desabasto de medicamentos, vacunación contra Covid-19 y otras enfermedades, falta de acceso a tratamientos o a servicios de salud. Ojalá el incremento de 10.7% del gasto en salud aprobado en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2022 se emplee de la mejor forma posible.
3. Inflación y recuperación económica: El rebote de la economía parece no haber tenido el impacto ni la duración esperada. Las proyecciones de crecimiento económico del Producto Interno Bruto de México (PIB) para el año 2022 en el consenso del mercado es de 3%. El de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público es de 4.1%. Además, la expectativa de inflación se mantiene fuera de la meta del Banco de México inclusive al cierre del siguiente año. En este contexto el consumo y la inversión difícilmente se reactivarán.
4. Elecciones y consultas ciudadanas: El debate sobre la consulta de revocación/ratificación de mandato continuará entre el Instituto Nacional Electoral y el Ejecutivo Federal. La reducción de 4 mil 913 mdp a su presupuesto, -29% respecto a lo aprobado en 2021, tendrá consecuencias. Además, el 5 de junio de 2022 se llevarán a cabo elecciones en Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. La carrera para el 2024 cada vez está más cerca.
5. Pacto y reforma fiscal: El debate sobre la repartición y recaudación de recursos por parte de la federación a las entidades federativas continuará. En los dos periodos ordinarios de sesiones del Congreso de la Unión se esperan diversas iniciativas para incrementar la recaudación y acordar nuevas reglas en la coordinación fiscal. El tiempo no se detiene y la presión sobre las finanzas públicas se incrementa.
En pocas ocasiones la agenda pública nos regala noticias nobles. Pero esto no debe ser impedimento para pensar en el futuro y en un México más próspero, incluyente y justo. Los buenos y necesarios deseos: felices fiestas estimadas y estimados lectores y que el siguiente año esté lleno de salud, dicha, debates y consensos. Muchas gracias por el acompañamiento durante este 2021.
*Las opiniones expresadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan la postura institucional.
Publicado en El Sol de México.
27-12-2021
